El sándwich recibe este nombre en honor al aristócrata inglés, John Montagu, IV conde de Sándwich, un gran aficionado a comer sin ensuciarse los dedos.
Entre otras de sus aficiones, este señor adoraba jugar a las cartas, tanto es así que no paraba de hacerlo durante horas y horas. Un día, el conde estuvo tanto tiempo frente a la mesa de juego, que para calmar su hambre pidió a sus criados un poco de carne entre dos rebanadas de pan, de tal forma que no se manchase los dedos, y así podría seguir jugando sin hacer pausa.
Y así es como este invento recibió el nombre de SÁNDWICH, aunque es países como España ha sido mejor conocido como emparedado en el pasado. Sin embargo, la palabra sándwich se ha ganado una connotación puramente internacional. Actualmente es prácticamente imposible encontrar una cafetería o bar donde no nos podamos pedir uno de estos bocaditos.
Tras la invención de John Montagu, en los años siguientes el sándwich se expandió por toda Europa, coincidiendo con el inicio de la Revolución Industrial, que fomentó la introducción de un tipo de pan especial, llamado pan de molde. Resultó ser un gran adelanto, ya que las madres que se ocupaban de sus casas ganaron tiempo en preparar desayunos y almuerzos muchos más rápidos y sencillos a sus hijos.
De esta forma, se hizo tan famoso que con el paso del tiempo, se dieron lugar multitud de variedades de sándwich, con distintos tipos de pan, ingredientes, salsas... ¡¡¡ Y ES QUE CON TANTO HABLAR DE COMIDA... ME ESTÁ ENTRANDO UN HAMBRE... !!!

No hay comentarios:
Publicar un comentario